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¿Qué sabemos del impacto de los programas de orientación y asesoramiento? ¿Hasta qué punto se convierten en instrumentos que mejoran la situación de los alumnos? ¿En qué ámbitos tienen impacto? ¿Cuáles son las características que deberían tener para ser lo más efectivos posible?

¿Qué sabemos sobre el impacto de los programas de formación y apoyo al profesorado para mejorar sus expectativas con respecto al alumnado?

El efecto Pigmalión, de forma similar a otras teorías que demuestran el impacto de las imágenes estereotipadas sobre los grupos sociales (el etiquetado, la profecía autocumplida, la imagen social reflejada), postula que las expectativas del profesorado condicionan y modifican, positiva o negativamente, los resultados del alumnado.

La investigación apunta que las expectativas que los docentes tienen respecto a sus alumnos son un factor que influye en sus resultados. Es lo que se conoce como “efecto Pigmalión”.

Los programas que intervienen en las expectativas del profesorado aumentan el bienestar emocional y mejoran el rendimiento académico de los alumnos más desaventajados.

¿Qué efecto pueden tener los prejuicios de los docentes en las capacidades de su alumnado? ¿Cómo responde el alumnado vulnerabilizado a las expectativas positivas del profesorado? ¿Cómo condicionan las expectativas negativas del docente el desarrollo académico de sus alumnos?

¿Qué efectos puede tener la clasificación del alumnado con dificultades de aprendizaje en la percepción y las expectativas del profesorado y en sus propios resultados de aprendizaje?

Incrementar la diversidad y la representatividad social en los docentes puede ser una palanca clave para reducir las desigualdades entre los resultados educativos del alumnado con situaciones socioeconómicas más y menos favorecidas. Porque ofrece referentes positivos de identificación a los colectivos minorizados, y porque de este modo se garantiza una atención educativa con menos sesgos y prejuicios.